Paisaje de la Presencia de Dios

Santa Teresa de JesusTu “andar” en la presencia de Dios, la transmisión de la Humanidad de Cristo, vivir en obsequio de Jesucristo, tus sabios consejos en la oración, tu “estar” en mi libro de las Obras Completas, guía y camino para encontrar a Jesús Camino Verdad y Vida...

 


 

Querida M. Teresa, mi querida Santa Madre:
En estas fechas en que estamos preparando el Centenario de tu nacimiento, quiero mandarte esta pequeña carta.
Dar las gracias al Señor Jesús por haber conocido tu carisma a través de tus obras leídas con verdadera “pasión” en la Biblioteca de la Parroquia de mis hermanos en la Calle Alboraya en Valencia. Experimentar la fraternidad en las Hermanas de mi Comunidad y el don al servicio de la Iglesia.
Tu “andar” en la presencia de Dios, la transmisión de la Humanidad de Cristo, vivir en obsequio de Jesucristo, tus sabios consejos en la oración, tu “estar” en mi libro de las Obras Completas, guía y camino para encontrar a Jesús Camino Verdad y Vida.
Paisaje de la ternura y de la Misericordia de un Dios hecho hombre. Jesús: “Todas las demás verdades dependen de esta verdad, y como todos los demás amores de este amor…” V 40,4.
Testimonio de la Fe, cercanía del Amigo, cercanía de ti Teresa, cercanía de la Sagrada Escritura.
Surge en estos tiempos la pregunta:
¿Hija de Santa Teresa, paisaje de la presencia de Dios?
Gracias por haber nacido, por haber sido testigo de la Presencia de Dios, por decirme que entre los pucheros también anda el Señor, por convencerme de la Humanidad de Cristo, por ser guía, compañera, amiga, madre, confidente en mi caminar ante Presencia del Señor Resucitado.
Gracias por la Orden del Carmelo, gracias por las Hermanas que a lo largo de mi vida has ido poniendo en mi camino que me han ayudado en este caminar, gracias por los años de formación en tiempos recios post-vaticano II, gracias por el tiempo “vivido” en el proceso de puesta al día en los estudios sobre tu carisma , gracias por la larga espera en la lucha paciente de la puesta al día de nuestras Constituciones, gracias por el diálogo interno con tus escritos, gracias por los Hermanos que me han ayudado en el discernimiento, ….
Gracias ante todo por vivir lo cotidiano entrelazado con la experiencia de un Dios tuyo y mío, mística de la comunión, vivencia encarnada en las hermanas, tu nos enseñas que sin comunidad no hay vida teologal.
La lista de gracias puede ser muy larga y extensa como las arenas de las playas….

 

AUTOR: Hna. Virtudes Parra | Carmelita Descalza (Altea)

TOMADO DE: www.paravosnaci.com